Criadero Madroñal acaparó aplausos en provincial de Río Negro

Por Guillermo Rojas Fioratti

Arriba de Cantor y Caudal y con las riendas de Rodrigo Cardemil Morrison -hijo de Rodrigo “Loly” Cardemil - y Mario Arancibia Devia, el criadero Madroñal de Marco Rodríguez se anotó un renovador triunfo al coronarse campeones este fin de semana en la final del rodeo Provincial del Club Río Negro, disputada en la medialuna de la citada localidad ubicada al sur de Osorno.

Y lo hicieron en grande ya que en una inspirada tarde que contrastó con el diluvio que cayó la jornada previa, marcaron sólidos 35 puntos, con parciales de 5 y 7 en los dos primeros toros y grandes 12 y 11 en el tercer y cuarto animal, gracias a novillos americanos que se corrieron a tres vueltas en el apiñadero.

“Feliz, el rodeo estuvo extraordinario, la organización y los novillos muy buenos, pero más feliz por la familia Rodríguez Varela. Los caballos de don Marco quedaron primeros y Germán Varela con Mario Matzner terminaron segundos. Somos todos un solo gran corral”, declaró Cardemil Morrison en diálogo con CaballoyRodeo.

A su vez, recordó fue Germán quien lo invitó a sumarse a este corral que además lo integra Miguel Arancibia que es el arreglador del criadero Madroñal de Marco Rodríguez, a quienes además se suman los hermanos Agustín y Martín Varela De La Maza, quienes siempre de atrasito esperan con paciencia sus turnos para entrar a las medialunas.

“Hace tres años que estoy viviendo acá en Osorno y llegué por asuntos laborales. No me dedico a los caballos pero tengo carné como jinete profesional. Trabajo en Copeval en el área de la venta de insumos agrícolas. Por ahí nos encontramos con Germán que me conoce desde niño y no demoró en invitarme a correr con ellos pero Mario (Arancibia) se quebró en su primera temporada y terminé corriendo con los hijos de Germán. El año pasado corrí en La Carmelita, con Jorge Hott. Y para esta temporada estoy de vuelta acá en Madroñal”, detalló.

Pese a sus 30 años confiesa que no ha corrido tanto como sus tíos o algunos de sus primos, recordando que debutó hace ya varios años atrás en Curicó, con 11 años, participando en las series menores, en rodeos escolares y algunos universitarios, pero es en Osorno donde ha podido correr más, lo que es una motivación -dice- porque “es una asociación muy entretenida, competitiva y que además tiene la oportunidad de correr el mejor ganado de todo Chile”.  

La caballada

En estos tres años que corre en Osorno ha corrido con Germán Varela, Mario Matzner, Jorge Hott y Mario Arancibia, por lo que no hay duda que podemos estar ante el despertar de un gran jinete.

Respecto a los caballos campeones dijo “ambos son de 10 años e hijos del Entonao (Escorpión y Trama) en madres Río Negro y Remehue, respectivamente. El Caudal es potro y es más nuevo. El Cantor es caballo, lo corro yo, es más firme porque se ha completado, creo, dos veces, una vez con la Esta Sí que es criada también en Madroñal y está acompañando al eterno Mariachi esta temporada”.

Y consultado respecto a las expectativas con esta collera mixta contestó como el mejor de los jinetes profesionales. “La principal es salir a correr ordenado, que los caballos se vean bien, acumular experiencia, aprovechar lo bueno de los rodeos, pasarlo bien con este tremendo grupo de amigos y si se da algo más… bienvenido”, concluyó.

La planilla del rodeo dice además que el segundo lugar del rodeo quedó en manos de Germán Varela y Mario Matzner en Esta Si y Mariachi, con 33 puntos; y terceros, criadero Mencahue, con Claudio “Chito” Ríos y Hardy Niklitschek, en Esa Jue y Loma Arriba, con 31 puntos.

El Cuarto Animal lo animaron además: Criadero La Carmelita, Jorge Hott y Andrés Salas, en Caperusa y Criollita, con +29 (collera que completó para los clasificatorios; Mario Valencia y Erwin Ojeda, en Vitalicio y Herencia, +28;  Criadero La Carmelita, Jorge Hott y Andrés Salas, en Cardenal y Consentida, +23; y Gonzalo Schwalm y Gonzalo Alfonso Schwalm, en Roto Rebelde y Cachureo, +20.

El Sello de Raza, jurado por Alfonso Angulo y Alberto Mohr, lo obtuvo Mano a Mano, montado por Rodrigo Willer.