¿De qué cono me hablan?

¿De qué cono me hablan?

Por Arturo Lavín Acevedo. Envíe sus comentarios a editor@caballoyrodeo.cl

Esto de haber estado averiguando sobre la semántica de la palabra guaso me hizo recordar mis inicios en esto del rodeo. Cuando (hace re muchos años) me empecé a entusiasmar y decidí que mis ahorros se destinarían a la compra de una yegua inscrita, algunos de mis familiares, agricultores de siempre pero nunca ligados a las medialunas, me trataban de convencer que no hiciera tal.  Me argumentaban que el ambiente era degradante, que se hacía ostentación de hablar mal, de farrear, de holgazanear y dejar los trabajos botados. Que muchos terminaban en la miseria y perdiendo todos los bienes familiares, que las familias terminaban botadas, etc. etc.

¿Para qué vamos a estar con cuentos? Que había harto de verdad, no se puede negar. Conozco casos como para escribirlos, pero... dejémoslos en barbecho por ahora. Eran otros tiempos. Hoy, en que existe una Federación organizada y en la que participan connotadas figuras de todos los ámbitos del país, la cosa no tiene porqué ser así. De hecho, como dice Don Leute, hoy, en que los guasos salen en las páginas sociales del Mercurio, "no hay tonto que no junte un poco de plata que no quiera andar vestido de guaso, en el "mesmito" Santiago".

Bueno, la cosa viene por esto del hablar, del lenguaje. Me he puesto como tarea que el ser guaso no tiene porqué ser sinónimo de ignorante. Aunque según los diccionarios y escritos de los lingüistas, al comienzo se le dijera guasos a los inciviles, toscos groseros, mal hablados, y otra retahíla de epítetos como estos. En los tiempos que corren habrá que haber evolucionado, mas no sea un poco. ¡No sé! ¡Digo yo!

Por eso como que me baja comezón al magín cuando escucho algunas expresiones tan mal avenidas y que se usan tan corrientemente sin pensar si corresponden o no.

Vamos echando juera no más. Han notado que en esto de la organización de los guasos, que según los Estatutos de la Federación tiene tres estamentos o grados, Club ¡mmmm!, Asociación y Federación. (La arriscá de nariz jue por que la palabra club tiene de castizo tanto como la de champion). Bueno pero sigamos. Entremedio, algún versado en palabras, pero no en idioma, geografía ni geometría, invento para designar a las zonas, más o menos afines, en que se dividió al país corralero (de forma absolutamente virtual, como se diría hoy, ya que no tiene ningún asidero legal), esto de dividirlo en CONOS. ¡Que palabra más mal usada! Claro, la palabrita estuvo de moda en esto de la geo-política y salía casi todos los días en los diarios y en la tele, refiriéndose al cono sur de América. ¡Oiga! ¿Le pido un favor? Agarre un mapa, ¿quiere? Échele una mirada a Sudamérica. No es cierto que su parte sur tiene una semejanza con la figura geométrica de un cono. ¡Claro!  La analogía como que pega, como que no "repuna" al sentido y a las formas. ¡Pero... sigamos mirando el mapa! Ahora clávele la visión a Chilito. Dígame... por'onde ve conos. ¡Claro... a no ser que tenga medio "entelá" la vista o se este "figurando" cosas. Haber. A qué se asemeja la forma de nuestra "larga y angosta faja de tierra". Pare... que estamos jugándo a la adivinaza, Como cuando niños. A cualquier cosa menos a un cono, ¿no es cierto? Y eso se mantiene aunque la partamos por tres, como lo hicieron los dirigentes actuales del rodeo.

¡Puchas! Entrémosle a la geometría. ¿Qué es un cono? Haber... para no caer en la definición del diccionario, digamos que: Primero, es un cuerpo. Es decir tiene volumen. ¡Ya pus! No es un plano. Segundo, es un volumen que en una cara o extremo tiene base circular plana y en el otro termina en un ángulo, cuyo vértice es concéntrico al punto medio de la cara opuesta. Por lo tanto... ¿por dónde pega con la figura de Chile? Para nada... ¿no es cierto?

Ahora otra cosa sería si por analogía se dijera que Chile tiene forma de huincha, de faja, o en último caso hasta de lombriz, por decir algo que se le pudiera ocurrir a un niño. Pero de cono... por favor... ¿por dónde?

¿Porqué será que estas cosas que inventa algún siútico, (por que no me va a negar que no es siútico hablar de conos por dárselas de sabiondo sin cachar ni una) se hacen carne en la mayoría y se siguen usando con un desparpajo supino. De que otra manera puede haber nacido este vocablo, con esta aplicación, si no es por siutiquería. Y fíjese que entre todos los epítetos que nos endilgan los lingüistas a los guasos, nadie menciona el de siúticos. Así que es simplecito, como antes tiempo diría Don Leute, digamos zona norte, zona centro y zona sur, y no andemos viendo conos donde no existen. No sigamos siendo siúticos sin haber pa'qué.

A propósito de siutiquería, como le suena eso "del Chileno". No es cierto que tiritan hasta las entretelas de las tripas cuando lo "mientan" así. Más encima algunos fruncen la "come cheican"  y les sale tan como miéchica. Cuando lo escucho me acuerdo del Matador Salas cuando jugaba en Argentina y le decían Shileno, se acuerdan. Porqué será que anda tanto "lile" del mate suelto para inventar pavadas. ¡Bahh... pare, que me le está pegando! Capaz que sea "contigioso", así que tengan cuidado.

P. S. A propósito, reciencito no más supe el origen de la palabra siútico, gracias a Don Mañungo Bunster quién me explicó lo siguiente: Antiguamente, era de tono vestirse con un traje inglés auténtico, y en inglés al traje se le llama suit, que se pronuncia así como siut. A los que no les alcanzaban las alforjas para comprase uno auténtico, se les ocurrió hacérselos iguales pero de telita local y de sastre nacional no más, a esos se les endilgo el apelativo de siúticos, por aparentadores, por simular tener lo que no tenían. 

Por si acaso: El Pequeño Larousse define la palabra como < siútico, ca  Adjetivo, chilenismo, familiar. Cursi, currutaco.

Entonces, Por favor no sigamos siendo currutacos.