Por Guillermo Rojas Fioratti

El apellido Hott es toda una institución en Osorno. Un parque, un club deportivo, el aeropuerto y una que otra calle lleva este apellido que recuerda a notables benefactores de esta familia que arribó a territorio nacional en la época de la colonización alemana del sur del país. Alberto Hott Schencke, alcalde de Osorno entre 1912 y 1928, y Alberto Hott Siebert, agricultor y empresario fundador de Feria de Osorno S.A., son algunas de esos antiquísimos personajes que contribuyeron al desarrollo económico y social de los habitantes de esta ciudad.

Pero también está el Rodeo. Es que antes de los Siebert, los Buschmann, los Gädicke o los Schwalm, acapararon miradas en el deporte huaso los Hott, donde sin duda los más recordados son los hermanos Alejandro y Julio Hott Kindermann, campeones de Chile de Rodeo, en Huilcoco y Felizcote, el año 1958, en aquella primera final nacional disputada en el histórico recinto Sago de la ciudad del rio Rahue. Años más tarde, en 1971, Alejandro Hott, junto a “Champita” Martínez, reverdecieron laureles para estas tierras con un vicecampeonato, en Campero y Tramposo, en la final nacional que por segunda y última vez se disputó en Osorno.

Hoy día, nuevas generaciones de los Hott se aprontan a escribir un nuevo capítulo y si es que ya no lo están haciendo. Y nos referimos a la collera de Carlos Hott Fuschlocher y Luis Francisco Hott Labbé, padre e hijo, que dirán presente en el próximo rodeo clasificatorio que se disputará la segunda semana de marzo próximo en la medialuna de Osorno… un escenario dable para los Hott.

Y para requerir sus opiniones, CaballoyRodeo.cl dialogó en exclusiva con Carloncho “Hott”…

Linda temporada, don Carlos…

Así es, segunda vez que me toca la suerte de completar con un hijo. La primera vez fue con Jorge, mi hijo mayor, en 1998, cuando él tenía 14 años. Corríamos por Cautín, Club Gorbea, y lo hicimos en Pichón y Alazán Lucero, llegamos al Clasificatorio de Osorno y nos ganamos el tercer lugar de la Segunda Serie Libre A que nos permitió correr en Rancagua. Y ahora me toca con Luchito, el menor de mis hijos. Hoy día tiene 27 años ya pero es la guagua. Se dedica también a la equitación y a veces me toca quedarme sin compañero pero ahora está dedicado más firme a los rodeos.

Eso sin duda la da un sabor distinto a su participación en los rodeos…

Claro. Mis hijos siempre han sido bien apegados y el rodeo lo disfrutamos harto y en familia. Yo llevo hartos años corriendo, he corrido y completado con Marcos Dinamarca, con Gabriel Orphanopulos y Mariano Torres. Pero también corrí con mi papá (Alejandro) durante 20 años. Y la primera vez que completé fue el año 1970, en los caballos que finalmente salió vicecampeón con el tío “Champa” Martínez, perdieron el champion frente a Pablo Quera y Raúl Cáceres por un punto.

¿Usted había hecho la campaña en esos caballos?

Sí, yo había clasificado con mi papá pero me reemplazó tio Champa porque en los caballos de salto me di vuelta, me fracturé un hombro y no pude correr. De hecho, estaba también clasificado para los juegos olímpicos en la selección nacional de equitación y tampoco pude ir. 

¿Qué significado tiene para Ud ser parte de esta verdadera dinastía que son los Hott en el Rodeo? 

Tremendo, pues oiga. Y déjame contarte que mi abuelo Hott Daniel se ganó su primer champion en 1928. Y te lo digo porque tengo acá en la casa premios que se ganó mi abuelo por aquellos años. Imagínate los años que los Hott estamos en esto de los rodeos y en las medialunas… son casi cien años ya.

¿Y qué nos puede contar de esta collera de yeguas que acaban de completar con su hijo?

Son yeguas harto poco corridas que se hicieron durante la pandemia. Tienen apenas 5 rodeos. Al primer rodeo que la sacamos premiamos pero no tuvimos suerte en el champion. En el segundo volvimos a premiar y nos ganamos el champion de un rodeo Provincial. Después en un Primera con Puntos salimos segundos. Al cuarto rodeo no tuvimos suerte pero este fin de semana, en Río Negro, logramos el tercer lugar y pudimos completar.

¿Qué edad tienen las yeguas?

Una tiene 8 y la otra 11. La Borrasca es comprada a Casas de Adobe de Alejandro Venegas pero desde potranca y estaba mansa de montura. Lucho la amansó y la echamos a trabajar en la casa. Es hija del Orgulloso Y la otra, la Taquillera es del criadero California, criada por Ricardo Hevia Hott, mi primo así es que queda todo en familia. La Taquillera es hija del potro Taquillero que corría José Luis Meier en el criadero Atalaya y de la Tamara II, una hija del Talonazo en una hija del Pícaro, de Carlos Cornelius.

¿Por qué clubes está corriendo en Osorno?

Yo corro por el Club Cancura y Luchito por el Club Osorno…. su tío “Cacaro” lo invitó y de ahí no lo saca porque es como un regalón del viejo ese.

¿Qué expectativas tiene para el Clasificatorio y de qué manera se prepararán?

De la misma manera en que hemos estado trabajando siempre. Y perdóname pero prefiero no hablar antes que llegue la fecha del Clasificatorio. Uno tiene expectativas, claramente, pero la ansiedad mata muchas veces lo que uno quiere lograr. Mientras más tranquilos estemos, mejor; le dijo a Lucho. Si las cosas se van a dar, se van a dar pero no hay que ponerse ansioso y hay que mantenerse calmo. Eso es lo que he aprendido con los años.

¿Y no le da miedo la pandemia?

Hay que cuidarse y nosotros nos hemos cuidado bastante. El consejo que les puedo dar a todos es que se cuiden y que se tomen muy en serio esto de la pandemia porque no es broma. Este fin de semana que acaba de pasar se manejó bien el tema de los aforos y había buen distanciamiento. Creo que en los rodeos los huasos hemos tomado harta conciencia y es de esperar que siga así para los clasificatorios.