El médico corralero Erwin Buckel, jefe del centro de trasplantes de la Clínica Las Condes, advirtió que la pandemia del coronavirus se quedará "por mucho tiempo" y que es imposible proyectar un plazo para la vuelta a la normalidad, debido a lo cual, presumiblemente, la actividad del rodeo tendrá que ser realizada con ciertas modificaciones.

"Si hacemos súper bien la pega como país, esto lo vamos a dar vuelta. En la medida que la gente mayor y más vulnerable esté bien cuidada, esto va a pasar como una ola que va a pegar duro, pero que va a pasar y vamos a poder retomar todas nuestras actividades laborales, familiares y deportivas, y sobre todo quienes estamos vinculados al rodeo y que nos pican las manos de poder correr, vamos a poder retomar nuestras actividades", señaló en diálogo con el Instagram Live de @ChampiondeChile.

El galeno explicó, en ese sentido, que "vamos a tener que reacomodar muchas actividades. Estoy seguro que la Federación de Rodeo está mirando esto de todos lados y viendo cómo se puede hacer de la manera más segura. Seguramente durante algún tiempo vamos a tener que correr de otra manera".

"Se habla que los partidos de fútbol van a ser sin público, que los tenistas no se pueden tocar, tienen que chocar la raqueta, así que creo que nuestro deporte también va a pasar por algún periodo en que va cambiar nuestra forma de hacer la fiesta corralera, una vez que las autoridades nos autoricen", complementó.

Luego, estimó que es muy posible que "a la larga", se retomen las actividades y se pueda correr "como siempre", pero considerando que "el impacto social va a ser súper relevante. Entre todos nos vamos a tener que apoyar, el mundo corralero va a tener la capacidad de colaborar y hay que aprovechar estas oportunidades y mostrar a los chilenos que el rodeo tiene esta parte cariñosa y solidaria de apoyar en momentos que se requiere".

Igualmente, el facultativo levantó la voz de alerta sobre la importancia de cuidar a las personas mayores, con quienes el coronavirus tiene un comportamiento "tremendamente vil": "Me han tocado muy de cerca situaciones tremendamente dramáticas con gente mayor, no solo la gente mayor que está postrada o enferma, sino también con gente mayor que está con buenas condiciones, que los toma el virus y los destroza".

"El mensaje más importante es que este virus es mucho más benigno con la gente joven, que es la que realmente transmite el virus; por eso, el llamado a la gente joven es que están en menos riesgo, pero son responsables de que se transmita. El mensaje es a los más jóvenes a cuidarse y no transmitir, a las familias el mensaje es extremar cuidados de distanciamiento social", continuó.

Por último, estimó que el COVID-19 se mantendrá por harto tiempo junto a nosotros: "En este momento es muy difícil. Ni el más experto es capaz de dar un pronóstico de cuánto va a durar esto. Hasta que no logremos que la curva empiece a bajar o una vez que se empiece a cruzar la curva de casos activos con la de casos recuperados, es difícil ponerle plazo a esto".

"En este momento, con toda la honestidad, no existe un experto en el planeta capaz de poner un plazo a lo que ocurre en Chile. Mientras no podamos dar vuelta a esta explosión, es imposible poner un plazo, lo más sano es por ahora pensar que esto nos va a acompañar por mucho tiempo", completó.