Por Diego Kort Garriga

Gran pesar causa en sus familiares y amigos la partida de Don Tomás Soto Armijo. Hombre que dedico su vida al campo y las tradiciones.

Con gratas palabras y frases características suyas, siempre recibió a todos quienes querían compartir con el, en mas de alguna ocasión contando simpáticas y largas historias, llenas de enseñanzas.

Fue un patriarca en su familia y un gran señor en su matrimonio.

Destacar su vida de huaso, desde sus inicios en tierras del sector del Manzano, aledaño al Lago Rapel y en su campo de Rastrojo en San Vicente de Tagua Tagua, donde fue destacado dirigente, corredor, criador y persona ligada a nuestro deporte patrio.

Creó lazos en todo sentido, dentro de su vida de agricultor y lo que nos une en este escrito, como su vida deportiva en nuestro caballo chileno, dando de este modo esta pasión inagotable en sus hijos, nietos y prontamente bisnietos.

Claramente en su casa siempre se vivió este ambiente de caballos que era un regocijo para los que fueron parte de esos momentos.

Siempre recordando las actividades de camperos y arreos que hizo por tanto tiempo de a caballo por varios lugares en la VI región y sus destreza en la medialuna por varios lugares de Chile, que aumentó aun mas su reconocido nombre.

Es por esto que nos tomamos un tiempo para hablar de este hombre que fue sinónimo en nuestro caballo chileno y vida familiar.

Don Tomo, que su memoria sea eterna.