Enrique Abarca Moya: Es un privilegio ser el Mejor Jinete Amateur de Valparaíso

La Asociación Valparaíso galardonó a Enrique Abarca Moya como el Mejor Jinete Amateur luego de su notable Temporada, en la que estuvo muy cerca de ganar un cupo al Campeonato Nacional peleando palmo a palmo el tercer puesto de la Serie Caballos en el Clasificatorio de Nos junto a su compañero Jaime Alvarez, quien fue destacado como Mejor Jinete Profesional.

El mentado corralero contó que luego de recibir este honor quedó muy contento "porque no es fácil, hay muchos jinetes que se merecen este premio en la Asociación, muchas parejas compiten por lo mismo y ser uno entre ellos es un privilegio".

En diálogo con CaballoyRodeo.cl, Abarca dijo que la distinción se explica "por el trabajo que se hizo en el año, don Sergio -Abarca- me pasó ese caballo para que lo corriera todo el año y tuvimos suerte de hacer 14 puntos en la Temporada Chica, en el año logramos el punto que faltaba y los completamos", hablando sobre Los Sapos Estupendo y Las Terrazas de San Isidro Don Maura.

De acuerdo al premiado jinete, correr junto a Jaime Alvarez quiere decir que el amor por la actividad "se traspasa de generación en generación, es un hilo que ojalá no se corte nunca", pues en el pasado su familiar Sergio Abarca compitió junto a Eugenio Alvarez.

"Lo más importante es que nos acompañó en los Clasificatorios mucha familia, que se conocen todos, de toda la vida. Nuestras pololas, los más cercanos. En esa Serie Caballos de Nos empatamos con los Arnau, quedamos a un punto en el desempate del tercer lugar, fue poco lo que faltó para llegar a Rancagua", repasó.

Además, destacó la gran cantidad de premios a jinetes jóvenes que se entregó en Valparaíso: "Me reflejo harto en ellos. Antes éramos pocos los jinetes jóvenes. Ver a estos niños y la familia que les da la oportunida de correr, lo encuentro extraordinario, se forman como personas, como jinetes, y el ambiente que se vive en el rodeo con cada uno de los corredores es muy bonito".

Para cerrar, dijo que "siempre está la ilusión de tratar de romper barreras, récords, intentar ganar, pero eso lo dice el tiempo, uno no puede disponer. Hay que esperar, los caballos son impredecibles, quizás mi compañero, que es profesional, puede partir a otra parte. Hay que disfrutarlo mientras se pueda".