Don Ernesto Jerez es un amante de los caballos y se le nota cuando comienza a hablar de sus caballos. Se emociona cuando rememora cómo con apenas nueve años comenzó a montar los caballos de su padre y como ahora ve a sus hijos y nietos montarse en los ejemplares que diariamente cuida en el Criadero San Sebastián.
Nacido en Angol, donde junto a su padre corrió contra los más reputados jinetes de la época, Ruperto Valderrama o Ramón Cardemil, don Ernesto se trasladó junto a su esposa y junto a su criadero a la Patagonia, donde aún vigente, tiene uno de los planteles más añosos de la zona.

Por supuesto, no ha sido fácil. El clima complican la labor, pero él lo hace con cariño y lo demuestra en sus palabras.

"Yo me inicié con una yegua que se llamaba la Cosa Rica y por ahí por el año 72 me fui a Coyhaique después de casarme y me traje todo de allá, incluidos los caballos, y en esa época hace 45 años, habían muy pocos caballos inscritos en la zona, y con los viajes al norte fui comprando más caballos", contó Jerez en entrevista con Caballoyrodeo.cl

"En Angol ya corría con mi papá cuando era chico y él me llenaba a los rodeos, y ahí conocí a muchos viejos de los que corren acá. Iba don Ramón Cardemil, don Ruperto Valderrama a los rodeos de Purén, estuve también en la inauguración de la medialuna de Los Angeles... Son hartos años ya. Ahí mi papá movió un potro que se llamaba Queltehue, que era criado por don Edmundo Moller, y salió segundo", añadió.

Y don Ernesto no abandona su pasión por los caballos. Los cuida y de hecho los extraña cada vez que sale de Aysén.

"Ahora mi hijo me ayuda harto con los caballos. Él es veterinario y corre conmigo, fuimos un par de veces a los Clasificatorios, pero yo sigo a la cabeza, para que se enfoque en su carrera. Allá es compleja la cosa, por el tiempo, y siempre uno debe estar preocupado. Ahora tenemos más de 30 caballos, entre ellos el Galante, un potro que compré en Santa Isabel, que es hijo del Fantástico en una hija del Talento, y lo hemos corrido, es muy acampado y se ha ganado también varias exposiciones. Tengo hijos del Quillay, que son muy buenos caballos y don Sergio Jara es quien me está ayudando en el arreglo de los caballos", contó.

Recuerda don Ernesto que su primer caballo criado fue el Lacho. "Estaba también la Cosita Rica, que era hija de la Cosa Rica, que nos dio hartos crías", dice orgulloso de lo que ha dejado.

"Ye tengo 14 nietos y varios de ellos me acompañan a cabalgar, entonces les trató de enseñar lo lindo de los caballos. Para mí es importante mantener esto, salir a exposiciones y mantener este criadero, que debe ser uno de los más antiguos de Aysén", añadió Jerez, quien recuerda a sus caballos favoritos.

"Está el Chasca, que lo pude correr en hartas partes. Estuvimos en el Gil Letelier, y después corrimos en Rancagua cuando todavía Aysén tenía cupos directos", finalizó.