Seis títulos juntos, nueve personales para Juan Carlos Loaiza y siete para Eduardo Tamayo. ¿Queda alguna duda de la grandeza de los emblemáticos jinetes del Santa Isabel?

La tarde del domingo 6 de abril, los "superclase" del rodeo chileno escribieron otra página histórica al conquistar el 66° Campeonato Nacional en una repleta Medialuna Monumental de Rancagua, con una actuación extraordinaria de 38 puntos en las yeguas Dulzura T.E. y Delicada T.E. (transferencia embrionaria), hijas del potro Talento, fallecido en febrero pasado.

Los jinetes de la Asociación Valdivia ya habían dado el aviso al ganar la Primera Libre A, pero lo realizado en la Serie de Campeones fue absolutamente superior, con carrera perfecta incluida y superando a los defensores del título, Gustavo Valdebenito y Luis Fernando Corvalán (Asociación Malleco) en los criollos del Criadero Peleco Compadre y Quitralco, que dieron batalla hasta el último y quedaron segundos con 35 buenos.

La sorpresa de la jornada fueron Fernando Alcalde y José Fernando Quezada (Asociación Valdivia), que se quedaron con un meritorio tercer lugar en El Baluarte Maitencillo y Las Vertientes de Riñihue Precio Mío con 30 puntos.

Todo eso y otros condimentos más, que pasamos ahora a revisar con detalle, se vivieron en el Champion de Chile, la fiesta máxima del deporte corralero.

Los momentos previos

Pasadas las 14:00 horas comenzó el movimiento en la medialuna, con los Grandes Premios de Exposición recibiendo el aplauso del público que ya estaba instalado en sus asientos, sin querer perderse nada.

Con el Orfeón de Carabineros de Chile acompañando en lo musical, se realizó un homenaje a Agustín Edwards Eastman, presidente honorario de la Federación de Criadores de Caballos Chilenos, y se les entregó un diploma a los jóvenes de Hipoterapia que también estuvieron presentes.

Una panorámica aérea de la repleta Medialuna Monumental. (Foto: Pablo Pérez Gómez)

Abelino Mora hijo y Galo Bustos Parada corrieron el Novillo del Silencio para homenajear a los socios fallecidos en la temporada.

Luego de eso, vino el Sello de Raza jurado por José Luis Pinochet, quien se inclinó por el potro Peleco Romario, montado por Gustavo Valdebenito, y con medidas 1,42 metro de alzada, 1,72 metro de cincha y 18,5 centímetros de caña.

Ya estaba todo listo para empezar a correr… y esta vez con cuarta carrera.

Estos viejos saben

Con Gabriel Orphanopoulos, Andrés Ruiz-Tagle y Andrés Saravia en la caseta de los jurados, 37 colleras empezaban la lucha por la corona, aunque a mitad del primer toro se anunció la mala noticia de que la pareja de Peleco del Chinganero y el Estupendo se retiraba por lesión del primero.

A esa altura, Tamayo y Loaiza ya habían sacudido las quinchas con 11 buenos en Dulzura T.E. y Delicada T.E., mientras detrás de ellos marchaba un grupo con ocho puntos.

Los propios jinetes del Santa Isabel le pusieron nueve enseguida en Cantora y Guardilla, aunque después no pasaría mucho más con ellas.

Los Campeones atajando. (Foto: Pablo Pérez Gómez)

A la hora de las apuestas, Peleco recibía más votos en Romario y Caballero, que partieron con siete buenos, pero los hasta ese momento aún Campeones de Chile Compadre y Quitralco mostraron sus quilates con 10 puntos en el primer huacho.

En el segundo animal se estrechó la pelea arriba. Felipe González y José Rojas (Litoral Central), que habían empezado con ocho en Casas de Bucalemu Bacán y La Chispita Hilvanada, sumaron siete y quedaron con 15; igual que José Omar Sánchez y Luis Huenchul (Colchagua) en La Reposada Rastrojero y Escuela Agrícola Maestro; el Criadero Principio, con Nicolás y José Manuel Pozo (Talca) en Espuma y Astil; los mencionados Alcalde y Quezada; y los infaltables Jorge y José Luis Ortega (Los Andes) en Las Mesas Picardía y Vista Volcán Pervertida.

Con 16 quedaba Palmas de Peñaflor, con Alfredo Moreno y Luis Eduardo Cortés (Talca) en Canela y Pinturita; y sobre ellos liderando Valdebenito y Corvalán en Compadre y Quitralco con 19; Tamayo y Loaiza con 18 y Manuel Muñoz y Rufino Hernández (Talca) en Rari Amalia y Tres Montes Campanario II, Campeones en el Clasificatorio de Lautaro, también con 18 tras ponerle 11 al segundo novillo.

Los Segundos Campeones. (Foto: Pablo Pérez Gómez)

Pelea de dos bravos

El tercer animal ya delineó quiénes iban a disputarse la corona. Los viejos del Santa Isabel hicieron tres atajadas de cuatro (dos de Loaiza y una de Tamayo) y el secretario Renato Alarcón cantó: "Carrera corrida, 13 puntos buenos".

La Monumental casi se vino abajo con la ovación y Dulzura T.E. y Delicada T.E. lideraban con 31.

Justo después de ellos Alcalde, debutante en una Final, y Quezada se agrandaban con carrera de 12 y quedaban tras el tercer toro con 27 en tercer lugar, detrás de Peleco que con 11 se ubicaba a un puntito de distancia de los del Club Futrono.

También pasaban al cuarto animal Palmas de Peñaflor con 24, González y Rojas con 23 y los Ortega también con 23. Se despedían Sánchez y Huenchul, Principio y Muñoz y Hernández, entre otros.

Los de Litoral Central abrieron el último toro, pero solo marcaron uno y terminaron con 24, ya lejos de los premios.

Le tocó a Santa Isabel. Tamayo falló la primera atajada a la mano, Loaiza le puso tres a la mano de atrás y el jinete que corrió por 42ª vez la Final en Rancagua cerró con tres más. Eran siete en la carrera y 38 en total, con lo que solo Peleco podía superarlos.

Los Terceros Campeones. (Foto: Pablo Pérez Gómez)

Antes que corrieran los de Malleco, Alcalde y Quezada veían peligrar su tercer puesto al sumar solo tres y acabar con 30, pero finalmente lo mantuvieron porque los Ortega quedaron con 29 y Moreno y Cortés con 27.

Solamente faltaba Peleco. Se ilusionaron con una atajada de cuatro de Valdebenito a la mano de atrás, pero no hubo más y con 35 puntos tuvieron que resignarse a entregar su corona a los nuevos Campeones: Tamayo y Loaiza del Santa Isabel.

La premiación final fue la guinda a la torta de este gran Campeonato Nacional, que gracias a estos fenomenales jinetes, que superaron a Ramón Cardemil y Ruperto Valderrama y quedaron como la pareja más ganadora de todos los tiempos con seis títulos, tendrá un lugar privilegiado cuando en el futuro se mire atrás en las historia del Champion de Chile.