Por Miguel Angel Moya, enviado especial a Chanco

Cruzando entre los majestuosos árboles de la reserva forestal Federico Albert y luego tranqueando y galopando por la playa de Chanco, los socios de la Asociación Cauquenes de Criadores de Caballos Chilenos efectuaron el sábado 29 de septiembre una cabalgata, cuyo principal objetivo era disfrutar de sus caballos, mostrando otra faceta del noble ejemplar.

El presidente de la Asociación, Juan Carlos Lara Benavente, definió para Caballoyrodeo.cl lo que fue esta iniciativa, expresando: "Habría sido un poco mejor si hubiera venido más gente; calculábamos sobre 30 personas; al final fueron alrededor de 25 y los que no vinieron se perdieron algo bonito. Creo que este otro año si nuevamente lo hacemos, van a estar de todas maneras porque verán que se perdieron algo valioso. La idea es participar y disfrutar nuestros caballos, vivir la amistad y el cariño de aquí de Chanco, que es muy grande".

También aprovechó de anticipar el próximo objetivo de la Asociación, señalando: "Nuestra próxima mira es realizar una exposición, porque no hemos hecho una. Esa es la gran tarea que tenemos porque es realmente lo que enaltece al Caballo. Ojalá la pudiéramos hacer dentro del año, si no, para la próxima temporada. Este año tuvimos el Día de Campo, hoy día la Cabalgata; tenemos una visita al criadero La Esperanza de César Núñez, quien nos tiene cordialmente invitado. Ya la haremos próximamente".

Arboles, dunas, playa y rica comida  

Pero no  todo fue cabalgar, pues esta jornada de camaradería a lomo de caballo, donde cumplió un rol organizativo fundamental el director de la Asociación, Aquiles Gutiérrez, partió con un  recibimiento-desayuno consistente  en ajiaco acompañado por malta con harina tostada, café y tortilla, para preparar el espíritu para lo que vendría luego.

Llegó la orden de montar, orden que también cumplió este enviado especial, subiendo a la montura de la yegua Rodaja, facilitada gentilmente por el criador Salvador Sánchez. Salió la caravana desde la medialuna del Club Chanco, encabezada por el abanderado Aquiles Gutiérrez y su hija Bernardita, el presidente de la Asociación, Juan Carlos Lara y más atrás los socios, pasando por la plaza de Chanco y sus principales calles, para luego encaminarse hacia la entrada de la reserva forestal Federico Albert e internarse en un sendero flanqueado por árboles majestuosos y tupida vegetación.

Al término de ese recorrido, donde los participantes se fueron compartiendo chascarros y hablando de caballos, vino la primera parada, donde esperaban sabrosas empanadas y con reconfortantes líquidos para calmar la sed. Luego, subir las dunas y encontrarse con la playa, mientras las olas reventaban estruendosamente y a lo lejos se veía Pelluhue.

Cabalgando sobre la arena, lo que algunos aprovecharon para sacarle postura a sus caballos, para juguetear entre las olas o para seguir dándole a la conversa, fueron pasando los minutos, hasta que alguien señaló el próximo punto de parada, donde ya esperaba el equipo de apoyo, con más líquido para combatir la sed y sobre las brasas exquisitas cholgas preparadas a la parrilla.

Todos echaron mano a sus cuchillos para abrirlas, verterle el jugo de limón y saborear ese regalo del mar. Y como no, acompañado por mostos de la zona de Cauquenes, propicio para hacer salud y brindar por la amistad.

Tras esa sabrosa parada y con el sol ya cayendo a plomo sobre las cabezas, se dio la orden de retornar a la medialuna, donde se estaba preparando un  asado para ponerle el broche preciso a una jornada de camaradería sobre caballos chilenos.

La vuelta también fue muy amena, algunos continuaron conversando al tranco de sus caballos, otros les dieron rienda a sus mancos, como Luis Landeros, que matizaba sus comentarios corraleros con otros sobre candidaturas en su comuna de Pelluhue, y Joaquín del Río, nativo de la zona y que durante esta visita también nos abrió las puerta de la casa familiar, construida en el 1700.

Llegaron todos los jinetes a la medialuna, sintiendo ya en el camino el característico olor de un buen asado de cordero y luego quedó a la vista la parrilla con las carnes chirriando y la mesa dispuesta en el casino. El asado fue complementado con música de nuestra tierra y con la actuación de integrantes del Club de Cueca Miguel Angel Gutiérrez, que anima las actividades de Club de Rodeo de Chanco.

Y así pasó la tarde, con brindis sucesivos, varias cuecas bailadas por los bailarines del conjunto y por algunos de los jinetes que se atrevieron, y las palabras del presidente de la Asociación agradeciendo a las personas que asistieron, a quienes organizaron en terreno esta cabalgata y a los medios de comunicación que la cubrieron.

Cuando ya caía la tarde, hora de las despedidas y también, en nuestro caso de agradecer la generosa hospitalidad que nos brindó don Aquiles Gutiérrez, su señora Bernarda y su hija Bernadita. Fue también una oportunidad para conocer algo más de los criadores de Chanco y Cauquenes y de sus actividades.