Por Miguel Angel Moya. Fotos: Luis Marcelo Alvarado, enviados especiales a Curicó.

• ¨La Atajada¨, recuerdos de un pasado
• Ramón Cardemil Moraga, Personaje de Leyenda
• ¨Nadie tiene ese gusto de verse inmortalizado en vida¨
• Admiración total por la figura de ¨On Ramo¨

En muchos rostros la sobriedad dio paso a la emoción cuando Ramón Cardemil Moraga, el siete veces Campeón de Chile, llegó el sábado 19 de agosto hasta la Plaza del Rodeo de Curicó para presenciar la inauguración de la obra escultórica "La Atajada", un homenaje al Rodeo y también a su persona, pues en la maciza roca aparece detenida en el tiempo su famosa atajada del año 1981, en su fiel y espectacular potro Bellaco.

Autoridades comunales, encabezadas por el Alcalde de Curicó, Celso Morales Muñoz; de la Federación del Rodeo Chileno, con su presidente Vicente Caruz Middleton a la cabeza; de la Federación de Criadores de Caballos Chilenos, con el vicepresidente Luis Iván Muñoz Rojas y otros directores, parlamentarios, jinetes, dueños de criaderos e invitados especiales, participaron y acompañaron en esta ceremonia al insigne Ramón Cardemil, quien, acompañado en todo momento de su familia, recibió de todos los presentes las mayores muestras de afectos y aunque no pudo retribuirlas como él hubiera querido, por su actual estado físico, era fácil observar en sus ojos la intensidad del momento que estaba viviendo.

Como en toda ceremonia de esta índole, la inauguración partió con la interpretación del Himno Nacional y el izamiento del pabellón patrio, luego de lo cual se dirigió a los presentes el vicepresidente de la Corporación Cultural de la Municipalidad de Curico, Patricio Lago Yáñez.

"Hay ocasiones para celebrar y estar muy feliz. Hoy es una de ésas. Las razones son bastantes; se inaugura este monumento que corresponde al segundo de una etapa de siete que formarán el Museo Urbano de Curicó".

Luego de describir los distinto pasos que se fueron cumpliendo y los obstáculos que se interpusieron en el camino, señaló que sin la participación de César Núñez, el monumento tal vez aún no sería realidad y dijo que se debía agradecer a "tantas personas generosas que, en su gran mayoría ajenas a nuestra ciudad, pero amantes de nuestro rodeo, colaboraron con mucho cariño a que esto se convirtiera en realidad". 

Esencia de la Chilenidad

César Núñez, principal gestor de esta obra, también se dirigió a los presentes, y en varios pasajes de su discurso debió bregar con la emoción que lo desbordaba. Señaló, por ejemplo, que a la ceremonia vinieron de todo el país "los mejores huasos, los que más aman el rodeo, los que más aman las tradiciones, para estar presentes en el descubrimiento de esta escultura".

Indicó que el de Curicó se constituía en el "primer monumento público en homenaje a nuestro deporte nacional, el Rodeo. Expresión que funde en su esencia la chilenidad entera, pues en él se resume nuestra identidad y cultura plasmada en esta acción que ejecuta este huaso y su caballo: la atajada. Expresión de la bravura e hidalguía que nos caracteriza como pueblo".

 César Núñez, el gran gestor de la obra.

Y añadió que "de esta noble roca, la maestría de las escultoras Graciela y Beatriz Albridi, hizo que obtuvieran la esencia de uno de los nuestros. Ahí está personificado el huaso más grande de todos, él que hizo su apellido sinónimo de Curicó: Don Ramón Cardemil Moraga, siete veces inmortal".  

Luego de la intervención de este orador, un grupo de niños integrantes del Taller Folclórico de la Escuela Venezuela recreó una atajada, provocando el aplauso entusiasta de todas las personas presentes en la Plaza del Rodeo.

El Rodeo está de fiesta

Luego habló el Alcalde dueño de casa y presidente de la Corporación Cultural, Celso Morales Muñoz, quien expresó en parte de su intervención: "El Rodeo Chileno está de fiesta, con la entrega a la comunidad nacional del monumento a este deporte que tan bien caracteriza al hombre de nuestro campo y que en esta escultura se ha querido simbolizar en don Ramón Cardemil y su potro Bellaco, un binomio que se ha fundido en el alma popular de la nación".

Acotó, asimismo, que "el siete veces Campeón de Chile  ha prestigiado el nombre de Curicó en los más famosos rodeos del país, donde junto a figuras como Ruperto Valderrama  y Manuel ¨Farolito¨ Fuentes compartieron la gloria del triunfo, llenando de entusiasmo y orgullo a sus seguidores en la medialuna de los nacionales".

Y enfatizó que el rodeo curicano "que alguna vez fuera considerado el mejor de Chile y que ahora con legítimo derecho busca reverdecer laureles, puede mostrar muchas figuras que son precursores y parte de este monumento, entre los que podemos resaltar a Jesús Regalado Bustamante y Oscar Bustamante, a Pablo Quera y Raúl Cáceres, a Hugo y Hernán Cardemil, Alfonso 'Chiqui' Navarro, entre tantos otros, que junto a don Ramón defendieron los colores de Curicó".

Agradecimientos del Campeón

Agradeció el homenaje a nombre de su padre, el parlamentario Alberto Cardemil Herrera, quien expresó: "Mi padre es un hombre inteligente y sabe que este monumento, esta estatua, tiene que ver fundamentalmente con la disciplina que él ha practicado con pasión durante toda su vida, que es el Rodeo. Y que este es un homenaje al Rodeo, costumbre, deporte chileno, expresión del caballo chileno al que él le ha dedicado los mejores momentos de su vida. Sabe que eso es así y está muy contento porque haya una plaza en Curicó y haya una estatua que perpetúe y le rinde un homenaje al rodeo chileno".

Añadió que su padre también sabe que es un homenaje para él, "y estar inmortalizado en una estatua ecuestre es algo que lo ha conmovido desde el fondo de su corazón: Y les da a todos un muy enorme y muy profundo Muchas Gracias. En nombre de mi padre, muchas gracias".

También enfatizó el agradecimiento a muchas personas e instituciones que participaron y colaboraron en el proyecto, destacando especialmente, por encargo de su padre, a dos personas "sin cuyo esfuerzo, sin cuyo empuje esto habría sido imposible", subrayó.

"Uno es el vicepresidente de la Corporación Cultural, Patricio Lago Yáñez; y la otra persona es César Núñez Villarroel, quien fue incansable en seguir este sueño que ahora es posible".

Y no faltó la bendición del monumento, que estuvo a cargo el Vicario Episcopal episcopal sacerdote Mauricio Jacques Sánchez., quien señaló que había que "dar gracias a Dios por lo que significa la familia del Rodeo", y que los monumentos, las imágenes, las estatuas son para recordar nuestras raíces y también para darles mayor fuerza.

Un buen augurio

"Es una obra extraordinaria y como símbolo para iniciar un período al frente de la Federación, yo le concedo muchos buenos augurios", señaló a Caballoyrodeo.cl Vicente Caruz, presidente de la institución corralera,  al referirse a la inauguración del monumento.

Agregó que "tener reflejado en esta estatua ecuestre a don Ramón Cardemil  que claro, es de una elite corralera y el más grande de los campeones, pero también un gran dirigente. Un constructor de la Federación, un constructor de la organización del deporte, y eso también está simbolizado en esta estatua".

Y la escultora Gabriela Albridi nos señaló: "En momentos como éste, una está nerviosa, ansiosa, orgullosa. Me siento muy feliz, muy honrada. Aunque nos demoramos como dos años y medio, más menos   y a veces nos cansamos, no tuvimos ninguna duda que iba a salir bien. Para mí, esta obra es un hijo, porque tuvimos mucho tiempo para que naciera. Pero también es un hijo de muchas personas, de todas las personas que permitieron que este trabajo fuera un sueño hecho realidad".